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l informe técnico-jurídico de Puertos del Estado ha despejado el camino de la Terminal Norte del Puerto de Valencia. En medio de una tormenta mediática, salpicada por el indudable uso político que se está haciendo del proyecto portuario, el presidente de MSC España, Francisco Lorente, ha dejado clara, en declaraciones en exclusiva para Diario del Puerto,  la inequívoca apuesta de la compañía por Valencia atajando de raíz cualquier amago de enfrentamiento.



Francisco Lorente, presidente de MSC España.

¿Cómo valora el informe de OPPE respecto a la Terminal Norte?

Las cosas están donde tenían que haber estado hace muchísimo tiempo. La Terminal Norte es una de las mejores cosas que le puede ocurrir al Puerto y a todo el tejido empresarial. Va a enriquecer a nuestra Comunitat de una forma contundente y va a consolidar el posicionamiento internacional del Puerto. La Terminal Norte va a generar riqueza y lo va a hacer sin ningún tipo de impacto ambiental.

¿Cuáles son los plazos que manejan?

TiL (MSC) tiene que aprobar ahora el proyecto. Son conocedores de la noticia y la llevarán a su Consejo de Administración del día 21 de abril. De esa forma, en cuanto se apruebe, la Autoridad Portuaria de Valencia podrá proceder a su adjudicación, que será en el próximo Consejo o en el siguiente. TiL está absolutamente ilusionada con el proyecto. España es una referencia para la compañía y ya tiene echadas aquí unas raíces que son indestructibles. Esto va a ser el inicio de grandes proyectos.

¿Cree que se van a encontrar con nuevos obstáculos?

Habrá recursos, casi seguro. Pero el sentido común prevalecerá y este proyecto maravilloso que va a hacer del puerto de Valencia una gran referencia internacional va a seguir adelante.

¿Cuándo prevé la puesta en marcha de la terminal?

La primera fase podría estar concluida en 4/5 años, la segunda llevaría un año y medio más. La tercera estaría para dentro de 7/8 años.

¿Cuándo cree que podrían entrar las máquinas en la Ampliación para ir dando forma a la Terminal Norte?

¡Me gustaría que empezaran mañana mismo! Pero bueno, siendo realistas, quizás podría haber movimientos de cara a final de año.

¿Ha peligrado el proyecto en algún momento?

Nunca ha peligrado la idea, pero cuando uno quiere vencer un muro a cabezazos, lo normal es romper antes la cabeza que el muro. Hemos sido malos vendedores, nos hemos quedado esperando acontecimientos y hemos confiado plenamente en el sentido común y la lógica. En ocasiones, para poder actuar así lo único que puedes hacer es esperar. Y esto ha hecho su efecto. Las personas que saben, los técnicos, han tomado una decisión que es acertadísima.
El proyecto ha tenido dudas, y es normal. No deja de ser sorprendente que a un inversor que viene a poner encima de la mesa una inversión de 1.200 millones se le pongan palos en la rueda… Puedo asegurar que en Ginebra se han recibido todo tipo de ofertas para acoger este proyecto con todo tipo de facilidades.
El proyecto de Valencia no ha zozobrado por el temple que siempre ha demostrado el propietario, la familia Aponte, y por la confianza que tradicionalmente han tenido en las instituciones.
Ha sido un largo camino, pero tenemos una alta sensibilidad con España, el país está en el Top Ten de la compañía; MSC ama a España y se ha volcado con este proyecto en Valencia. Nuestro presidente, de origen italiano, se podía haber volcado con cualquier otro lugar, pero ha sido España.

En esos momentos de dudas surgió el rumor de una posible compra de acciones de MSC en la terminal BEST del puerto de Barcelona…

Siempre hay inquietudes empresariales. Cuando una estibadora quiere vincularse a una naviera o una naviera quiere vincularse a una estibadora siempre hay un tira y afloja en cuanto a lo que quieres cobrar o pagar. Al final es muy difícil alcanzar determinados acuerdos; es mejor que una estibadora tenga su propia autonomía y que una naviera tenga sus propias estibadoras que trabajen para ella; buscar el mix es muy complicado.

FUENTE

Fecha: 15/04/2021


Este 2020 es un mal año para batir records. La incidencia de la pandemia en los tráficos portuarios está siendo muy notable desde el pasado mes de marzo, lo que va a dificultar a los tres grandes puertos españoles llegar a acumular hitos de tráfico portuario a lo largo de este ejercicio.

Hasta el pasado mes de julio, los puertos españoles movieron 9,3 millones de TEUs, lo que implica un descenso del 10,12% respecto al mismo período del pasado año. Estos descensos se reflejan asimismo en los records de 2020: únicamente ha habido cuatro meses este año en los que se han alcanzado cifras tope. El primero de ellos, el conseguido por Valencia el pasado mes de agosto, con 503.482 TEUs. Los otros tres los ha logrado Algeciras, en julio (428.815 TEUs), febrero (428.182 TEUs) y enero (443.480 TEUs).

Con todo, y a pesar de la situación de crisis que viven todavía las principales economías del mundo, China está recuperando volúmenes de carga previos a la crisis. Con el sector logístico inmerso en la campaña de Navidad, se está constatando un aumento de la actividad en los grandes hubs marítimos españoles, con un mes de julio que no está siendo tan malo como se esperaba inicialmente. Esto hace suponer que en las próximas semanas haya un repunte de los tráficos portuarios que pueda llevar a los tres grandes puertos españoles a nuevas marcas máximas.


No queda muy lejos en el tiempo cuando el sistema portuario español veía pasar a los gigantes del mar que se dirigían al norte de Europa desde Extremo Oriente. En esos años, sólo el Puerto de Algeciras optaba a las escalas de los grandes megabuques, mientras que Valencia y Barcelona, más volcados en la import/export que en el transbordo, se tenían que “conformar” con barcos de menor tamaño.

Sin embargo, el trabajo realizado por las Autoridades Portuarias -tanto a nivel comercial como en materia de mejora de las infraestructuras que gestionan-, los cambios en el sector de la estiba -acordando entre trabajadores y terminales medidas para ir incrementando la eficiencia de las operaciones- y la paulatina mejora de las infraestructuras terrestres para optimizar la conectividad de los puertos con su hinterland -a pesar del camino que aún queda por recorrer- han hecho que esta situación deje de ser excepcional en todos los grandes puertos.

Los tres grandes puertos españoles han demostrado que están capacitados no sólo para atender escalas de megabuques, sino también para hacer frente a operativas récord.

La concentración en el sector del transporte marítimo de contenedores es un hecho. Las navieras, con el objetivo de aprovechar al máximo las economías de escala, reúnen en cada vez menos puertos hub y en barcos más grandes un mayor volumen de carga. Por el momento, las grandes alianzas marítimas mantienen su apuesta por los puertos españoles, que a su vez han demostrado que están capacitados no sólo para atender escalas de megabuques, sino también para hacer frente a operativas récord tanto en movimientos de contenedores como en productividad.

Los tres grandes puertos cuentan con capacidad suficiente para seguir haciendo frente a esta realidad. A pesar de que la declaración del estado de alarma paralizó los grandes proyectos que se estaban acometiendo, lo cierto es que ahora mismo Valencia, Algeciras y Barcelona se encuentran inmersos en diferentes actuaciones de mejora con la que optimizar esa oferta.

FUENTE

Fecha: 23/09/2020